José Antonio Kast realizó una precisión pública sobre su propuesta migratoria pocos días después de ser electo presidente, durante una conferencia de prensa en Buenos Aires tras reunirse con el mandatario argentino Javier Milei. El presidente electo sostuvo que el Estado chileno no tiene capacidad para expulsar de forma inmediata a 300 mil migrantes en situación irregular, como se planteó durante la campaña.
En ese contexto, Kast afirmó: “Nosotros nunca dijimos que en el primer día íbamos a poder expulsar a 300.000 personas, porque es evidente que no hay capacidad para hacer eso”, aclarando que su propuesta apunta a que quienes estén en situación irregular abandonen el país y luego postulen nuevamente por la vía formal. Según indicó, en Chile hay cerca de dos millones de migrantes, de los cuales al menos 300 mil no tendrían su situación regularizada.
Las declaraciones contrastan con afirmaciones realizadas durante el periodo electoral, cuando señaló: “Esas 300 mil personas que están en condición irregular tienen que salir del país y les quedan 104 días”. Además, en Argentina volvió a plantear la idea de coordinar un “corredor humanitario” con otros países de la región para facilitar la devolución de migrantes, tema que aseguró haber abordado con autoridades de Bolivia, Perú, Ecuador, Panamá, Costa Rica y El Salvador.